sábado, 16 de marzo de 2013

Confidencialidad del Paciente


No se debe entregar información de los pacientes a personas que no están autorizadas para recibirla.

Debemos evitar ser engañados y no entregar información confidencial vía telefónica y menos si no podemos verificar la identidad de quien la está solicitando.

Siempre se debe informar a las entidades reguladoras si alguien que no está autorizado quiere acceder o trata de conseguir información de los pacientes.
Existen personas que usan engaños para obtener informacion confidencial, es una tecnica muy antigua que se conoce como ingenieria social.

La información del paciente es confidencial, está sometida a reserva legal y debemos custodiarlas.

Según el juramento hipocrático el medico tiene la obligación de guardar el secreto de lo que oiga y vea en el ejercicio de su profesión, que no sea indispensable revelarlo ante la sociedad. La base de este principio es la misma condición humana pues el ser humano tiene una dimensión interior que hace que no divulgue su historia personal ante los demás: “Por tanto, una manifestación de respeto de la dignidad de cada ser humano y de consideración como persona, es la debida reserva de lo que se conoce de una persona en su condición de enfermo”. (1)  (Andrés Aguirre Martínez - HTPU)

El paciente deposita toda su confianza en el equipo de salud quien deberá resolver su padecimiento físico al igual que proteger de su dignidad, si esto se incumple el paciente se sentirá vulnerado.
Hoy en día la confidencialidad se ve amenazada e irrespetada por la gran cantidad de actores que participan en el sistema de slaud, la falta de formación ética de los profesionales, el gran auge que ha tenido la tecnología entre otras.

Hay unos principios básicos que debemos cumplir: “Cuidar que las conversaciones con los paciente se hagan en un sitio reservado, no compartir la historia clínica ni la información asistencial sino con la debida autorización del paciente y  a las personas que deben tener dicha información, hacer uso de las cortinas para evitar miradas de terceras personas, suministrar la ropa hospitalaria adecuada para cubrir al paciente entre otros” (1)
No se debe tomar fotos a las historias clínicas de los pacientes pues se estaría violando su confidencialidad.

Las claves y contraseñas de los trabajadores de la salud son de uso personal y solo se entregan después de realizar la capacitación y firmar el compromiso de confidencialidad. 



CONFIDENCIALIDAD


Uno de los componentes más importantes de la ética médica  desde los tiempos de Hipócrates ha sido mantener la información del paciente en secreto.

Según el juramento hipocrático: “Guardaré silencio sobre todo aquello que en mi profesión, o fuera de ella, oiga o vea en la vida de los hombres que no deba ser público, manteniendo estas cosas de manera que no se pueda hablar de ellas.”, este deber de confidencialidad ha perdurado en el tiempo e incluso otros códigos la han integrado pero  sin embargo no quiere decir que sea absoluta pues de hecho hay otro códigos que plantean que bajos ciertas circunstancias con justificación la confidencialidad pueda ser quebrantada.
 

La Confidencialidad se basa en: la autonomía, el respeto por los demás y la confianza.

Autonomía: quiere decir que la información de cada persona es única y no se debe dar a conocer sin su autorización.


La privacidad es una forma de mostrar respeto, es importante saber qué  información personal el paciente quiere mantener en secreto y cual se puede publicar.


La confianza es muy importante en la relación médico-paciente, y se debe  dejar claro al paciente que la información que él va a revelar va ser confidencial y no  se revelara sin su consentimiento, porqué  si el paciente no logra entender esto no nos  brindara la suficiente información y esto puede empobrecer la labor del médico.

Solo hay tres excepciones de la regla para ocultar la información, según la AMM


1. luego de la muerte del paciente se debe brindar información a la familia  cuando hay riesgo de salud pública
2. cuando la ley lo autoriza
3. cuando se necesita  brindar información a otro personal de la salud  para brindarle un servicio médico al paciente en cuanto siempre este la autorización previa de este.

Cuando los pacientes no pueden tomar sus propias decisiones médicas, hay que darles información a otras personas sobre ellos para que de esta manera puedan tomar decisiones en su lugar y así poderlos atender.

Generalmente el médico le dice a los familiares en caso de que el  paciente muera la causa de su muerte y esto  es una justificación de quebrantar la confidencialidad pero aun así se deben tener cuidado en no revelar más de lo que se necesita; también es justificable quebrantar la confidencialidad si hay requerimientos legales.



Si llega a ser necesario que el medico revele información del paciente, siempre será preferible pedir permiso al paciente; si no se llega a un acuerdo con el paciente, y el medico considera que es realmente importante publicar la información, se deberá hacer solo  si cumple con los requisitos legales.

El medico está en el deber ético de entregar información confidencial a otros que pudieran correr riesgo de ser perjudicados por el paciente, sobre todo cuando se cree que el riesgo es inminente, grave, irreversible e inevitable, sería mayor este daño que el daño producido por la  revelación de la información del paciente, como ocurre en el caso de pacientes VIH (+) que tienen riesgo de seguir teniendo relaciones sexuales indiscriminadas que podrían infectar a otras personas.  Cuando el medico no está seguro de esto podría pedir ayuda a un experto. Esta información se debe revelar solo a las personas que la necesitan para evitar todo perjuicio y solo se debe divulgar lo necesario para evitar el daño anticipado.
El medico tiene la obligación de informarle al paciente que su información podría ser revelada por su propia protección y la de su víctima potencial y tratar de obtener su cooperación.
En caso de que el medico deba atender a un convicto debe hacer lo posible para tratar a estos pacientes como lo haría con los otros y no debe revelar detalles de la condición médica del paciente a las autoridades de la prisión sin obtener antes el consentimiento del paciente.